miércoles, octubre 11, 2006

Tardes que no pasan ni en Balde ni en Madrid

Me surge una pregunta:
no es mas bonito buscar que encontrar?

Porque es en la busqueda donde hay ilusión, donde hay esperanza. Recientemente he escuchado o leído, ya no sé, que en realidad lo único que se pierde es la esperanza. Creo que era en un libro de Andres Neuman, uno de esos extraños libros que uno se encuentra a veces sin buscar, un libro lleno de retazos, pinceladas, pequeñas frases ingeniosas que agarran a uno con la misma rapidez con la que lo sueltan. Me ha dado por clasificarlo dentro de un tipo de literatura que me he inventado, la literatura del abrazo. El inspirador de esto es evidentemente El libro de los abrazos, del gran escritor uruguayo, que tanto admira este que les habla, Eduardo Galeano.
Pero no venía a contar esto, aunque a decir verdad, a que venía yo?
Como decía Amparanoia en una canción: Solo he venido a darte un abrazo, yo ya mismo me voy.
Pues eso.
Un abrazo!

1 comentario:

gaia56 dijo...

ay, señor... ¿por qué me suenan estas palabras cercanas y conocidas?
el libro de los abrazos es una buena herencia que alguien me dejó.
Bico y abrazo.